lunes, 20 de febrero de 2012

Entre lo real y lo literario: La Crónica
Propuesta de trabajo
“La literatura está hecha para que la protesta humana sobreviva al naufragio de los destinos individuales”
Jean Paul Sartre
Nuestra propuesta se encamina a abordar textos narrativos de carácter literario y periodístico, en este caso trataremos crónicas que abordan un problema que causa paradigma en los campos lingüísticos y educativos, la relación entre géneros textuales, muy presente en este tipo de enunciados. Se abordará, principalmente la relación entre funciones semánticas y pragmáticas, busca despertar en el joven la necesidad de informarse acerca de los diferentes hechos que suceden a su alrededor, entablar un diálogo entre la realidad y el texto. En este caso se abordará a partir de la crónica; bien lo dice Luis Nieto cuando dice que “El profesor tiene que utilizar las aportaciones de las ciencias del lenguaje y los estudios literarios para actuar sobre una realidad social”.
Entonces, el trabajo se encuentra  encaminado hacia la competencia textolingüística como núcleo o guía en los procesos de lectura, busca despertar el afán por comprender su realidad y generar en el educando una actitud crítica que le permita ver aspectos de la realidad desde de diferentes ópticas y perspectivas. En este caso trabajaremos en primera instancia la crónica literaria de Luis Tejada, analizaremos aspectos textolingüísticos y de género que le permitan al joven caracterizar y dar una definición detallada de lo que es la crónica literaria. 
Marco Teórico
“Y en tanto la crónica está ahí, en el cuarto, en la calle abandonada, en la voz que narra el desconsuelo, es incómoda, como incómodo testigo de aquello que no debiera verse, por doloroso o por ridículo, que a veces es lo mismo.”

Rossana Reguillo
Cada día a cada minuto la sociedad se actualiza, el mundo experimenta cambios y pronto la humanidad entera se desenvuelve en ellos de forma tal que pasan a ser parte de la cotidianidad. Muchos de estos cambios llegan de forma casual a la vida de las personas, puesto que no siempre podemos estar en el lugar de origen de dichas novedades, más en un país en vía de desarrollo como Colombia, que aún depende de tecnologías extranjeras para progresar paso a paso. Es dentro de esta problemática de desarrollo y actualización donde la crónica juega un papel social e informativo trascendental. Miremos la definición de crónica que nos brinda Rossana Reguillo, para tratar un texto narrativo que cobra más vigencia dentro de nuestra sociedad actual. “La crónica, en femenino, relación ordenada de los hechos; y en masculino, lo crónico, como enfermedad larga y habitual, se instaura hoy como forma de relato, para contar aquello que no se deja encerrar en los marcos asépticos de un género.”

Es probable que a pesar de nuestra preferencia por la televisión, esta no logre opacar, por completo, a la prensa, puesto que cada vez hay más facilidades de acceder a los diarios más populares por medio de las distintas redes sociales y por las mismas páginas web que ofrecen los periódicos; y es que es absolutamente necesario conservar este tipo de medios, puesto que sin importar que tan real sea la imagen, y que tanto nos aproxime a la realidad, la capacidad de descripción y las secuencias expositivas y las distintas miradas particulares que brinda cada cronista nos permitirá ver una nueva manera de analizar y criticar el mundo. La crónica no solo conserva un aire narrativo sino que une al lector con la situación por medio de una exhaustiva selección de palabras que llamen la atención del lector, cabe afirmar que esta, no está escrita de forma informal sino que obedece a una base estructural que le permite un completo desarrollo de la información. Teniendo en cuenta lo anterior el estudiante podrá apreciar el proceso de construcción de la crónica, lo que le brindará una oportunidad de acercarse a otro tipo de texto relacionado con esta como es el caso de la crítica como texto periodístico que además de dar una mirada general de la situación permite opinar sobre esta.
Como en cualquier texto la crónica tiene una base general, la macroestructura semántica. “La macroestructura de un texto es una representación abstracta del mismo que tiende a la aprehensión global de su significad”.[1] De este modo vemos a la crónica  como una unidad semántica que mantiene una cohesión gramatical y léxica a un mismo tiempo. Un análisis global del texto, transmitido mediante proposiciones perfectamente engarzadas entre sí, demuestra que existe una coherencia interna que permite al lector entender el mensaje. Los textos no sólo pueden analizarse u organizarse como una macroestructura semántica sino que también se sistematizan de acuerdo con una superestructura formal, que responde al organigrama milenario de cómo contar una historia: planteamiento, nudo y desenlace.
Propuesta Metodológica
Nuestra Propuesta metodológica estará organizada de la siguiente manera:
-Lectura de diversas crónicas periodísticas y literarias, además de noticias y diversos textos informativos para entender la diferencia que existe entre la crónica y la noticia.
-Enfatizar en la crónica literaria de Luis Tejada como precursor y padre de este género narrativo.
-A partir de los escritos realizados con los diferentes muchachos, organizar y definir qué es una crónica.





[1] VAN DIJK, T. A. (1985a): "Structures of news in the press" in T. A. van Dijk. ed. Discourse and Communication. Berlin/NJ.: Walter de Gruyter. pp. 69-93. En: “Estudios sobre el mensaje periodístico”Nº 6


Conociendo el amor
En el transcurso de mi corta vida había salido ya con muchas mujeres  pues nunca había sentido lo que era amar, ya que para mí era solo el estar con alguien y pasarla bien, hasta hace 14 meses que note que una vecina me miraba y coqueteaba, al notar esto me dije ¿Por qué no invitarla a salir?  Pues pensé que iba a ser otra persona más en mi vida, me decidí a salir con ella pero no sabía cómo decírselo hasta el jueves que la note llegar en le mañana he irónicamente le dije ¡ hola vecina no te había visto desde hace tiempo ¡ mientras por mi mente pasaba jejejejeje pues yo la veía todos los días , a lo cual me respondió que era por el trabajo le dije que necesitaba descansar o hacer otra cosa para distraerse le pregunte que iba a hacer el fin  de semana a lo  cual me dijo q iría a cine con unas amigas, le dije que si me llevaba sin esperar la respuesta me dijo que sí que me esperaba el domingo en horas de la tarde sin dudarlo le dije bueno yo paso por ti a las 3 terminado así ese día la conversación, el domingo en la mañana recibí una llamada de ella recordándome lo de la cita lo cual no recordaba pues me levante y organice lo q me iba a llevar sin esperar tuve que salir lo cual me quito el tiempo que tenía para alistarme siendo ya casi medio día y tenía que cortarme el cabello pues al llegar a la peluquería estaba llena lo cual tuve que esperar , y note que era el único hombre hay y me estaban molestando otras niñas notando que  tenía prisa por salir siendo las 2:30 de la tarde Salí corriendo a casa para bañarme cuando llegue a la casa note que ella estaba en la puerta esperándome, sintiendo pena le dije que me esperara un poco pues me iba a bañar.
Creo que nunca había tardado tanto en alistarme ya que salimos casi a las 4 de la tarde en el transcurso del camino recio una llamada de la amiga informando donde iban a estar llegamos y entramos a otra sala del cine en donde las amigas no estaban  creo que su intención era estar sola con migo, ya que sus amigas nunca aparecieron, nos vimos una película para niños la cual casi no preste atención ya que estaba más interesado en hablar con ella hasta tener la oportunidad de darle un beso y de ahí en adelante lo seguí haciendo al salir de la película ya me había hecho su novio. Fue pasando los días y pronto ya una semana de estar con ella empezaba ya a sentir que era una persona muy espacial  con migo era única y sin darme cuenta me fui enamorando de su forma de pensar y actuar pues me demostró que yo soy todo para ella hasta el día de hoy el cual me siento enamorado no poder explicar cómo es  porque el amor no se describe se siente…

Nombre: Deiby Anaya Tarazona
Edad: 21 anos.      Oficio: técnico en redes. Mail:       deiby_512@hotmail.com




Un lunes de clases en la UIS
Abrí los ojos y me di cuenta de que inconscientemente había apagado el despertador, y pensé es lunes tengo clase a las 6 am, rápidamente mire el reloj y no me encontraba a buena hora era las 4:40 am, cualquiera pensaría que es muy temprano, pero vivo en Piedecuesta y cada bus se gasta un tiempo de 50minutos a una hora, entonces como pude me bañe y rápidamente me aliste , creo fue el baño más rápido que me di en la vida; me aliste con lo primero que encontré en el chifonier, cogí los libros que por suerte el día anterior ya los había alistado, desayune con un yogurt y me fui a paso rápido a la parada de buses.
Conté con suerte y pude agarrar rápido el bus, pero la suerte no duro por mucho pues el bus estaba totalmente lleno y me correspondió todo el camino de pie a lado de más estudiante que también se dirigían a la Universidad Industrial de Santander. Después de 50 minutos de camino, llegue  a las carrera 27, donde me baje y me dirigí rápidamente Universidad, cuando llegue al salón de clases, me excuse con el profesor y pude ingresar normalmente, estaba asustado pues pensé que se había hecho un quiz en los primeros minutos de clase ya que estábamos viendo temas finales, para los parciales. Terminadas esas dos horas de clase me dirigí a la biblioteca donde después de estudiar un tiempo me quede dormido en el tercer piso, pienso que fue porque el día anterior había trasnochado. Una compañera se me acerco y discretamente me despertó, ella muy amable me recordó la hora, me di cuenta que ya era hora de almorzar, aproveche y me dirigí almorzar con ella. Después de almorzar con ella, nos dirigimos al primer piso a estudiar, pero en toda la tarde se nos fue posible concentrarnos totalmente, ya que en la mesa del lado se habían sentados dos costeño, los cuales hablaban mucho y muy fuerte, sus comentarios y forma de referirse a las cosas no nos permitieron tener un buena tarde de estudio; con el tiempo terminamos de estudiar y a las 6 pm, salimos de la Universidad, donde nos separamos para irnos cada uno hacia su casa.
Casado del día que había tenido, me monte en un bus, en el cual me quede dormido casi todo el camino, llegando a casa, creo que por instinto me levante y me fue posible bajarme del bus en el momento indicado, como todos los días hice comida, me  bañe , aliste libros y apuntes del siguiente día. Al terminar de hablar con mis papas, me dirija a dormir; pero esta vez no solo puse la alarma del despertador sino también la de los celulares y así prevenir que en el siguiente día me ocurriera lo mismo, de tal manera los distribuí por la habitación para que no los pudiese apagar dormidos y así no me volviera a levantar tarde.



Nombre: Ferney Steven Peña Tarazona
Edad:       20 años
Oficio:     estudiante de Ingeniería Industrial
Mail:       Steven_0923hotmail.com




domingo, 12 de febrero de 2012

Mi primer novio en el colegio

El primer amor no se olvida y sé que soy muy joven para decir eso, tengo 18 años y mi primer novio lo tuve hace dos años, en realidad fue como por saber lo que se sentía tener un novio, luego de que me di cuenta que él estaba muy interesado y yo sólo era para probar, como era eso le termine. Pero a la semana ya empezaba a extrañarlo era un sentimiento extraño algo que nunca me había pasado era como si me faltaba una pieza de mi era muy extraño pero lo tome normal pensé que sólo era porque le había agarrado cariño pero sólo basto verlo con otra muchacha besándose y enterarme que a la semana de que yo le terminé ya tenia novia, me dio mucho dolor y rabia en eso momento me arrepentí de haber terminado con él, me la pasaba llorando como una h.p., porque veía que él ya no era el mismo de antes, ya no era aquel niño tierno y dulce que yo conocía, me sentía mal porque pensé que era muy egoísta de mi parte sentir eso. Pase muchos días triste y arrepentida porque entendí que el era el novio perfecto.
Hasta que ya saliendo del colegio tome la decisión de pedirle disculpa Y aceptar que fue mi error, y le dije todo lo que yo sentía por él, sólo me miro, y dijo ok, y yo me sentí, bueno, pésimo. A los días me toco ir a su casa, pasaron cosas muy bonitas entre él y yo, claro no pasó de besos y caricias, me sentía como una princesa porque siempre tuve un mal concepto de los hombres, que lo que quieren es acostarse y ya. En cambio él me respetó, fue muy lindo conmigo, y aunque tuvimos muchas ocasiones como para tener relaciones nunca pasó nada, él se portó como un caballero y yo como una Dama, estaba muy feliz porque al fin se dio lo que yo quería, pero me puse a pensar y dije pero nosotros no somos novios, él no me había dicho nada a los días, lo vi con una muchacha besándose, luego fui a una fiesta en su casa y lo vi con una vieja loca en su cuarto, ya dije bueno qué pasa aquí, él no me respetaba como novia y cuando hablé con él y le pregunté qué era lo que estaba pasando, me dijo que sólo éramos amigos, y yo  qué me dijo, no me puedes reprochar nada sólo somos amigos, y yo ahora no le dije nada, quizás porque siempre me sentí culpable de su cambio y seguía pasando lo mismo entre nosotros.



Hasta que entramos al otro año del colegio, en décimo grado, cuando lo vi fue una sorpresa, sentí mariposas en mi pansa, sentí ganas de abrazarlo besarlo y decirle que siempre lo había pensado, pero por orgullo por dignidad me aguanté y no le dije, lo traté normal como un amigo a los días, lo seguía viendo y un día él me dijo que quería hablar y yo, bueno, muy contenta por dentro, obvio feliz le dije ok, hablamos y me dijo cosas muy lindas, me prometió de todo, me dijo que él se había dado cuenta que conmigo quería compartir su vida y que me iba a demostrar su amor con palabras y con hechos y me pidió una segunda oportunidad, yo al escuchar al amor de mi vida diciéndome todas esas cosas tan hermosas, obvio le dije que sí, que yo le iba a dar la oportunidad. 

Pasaron los días y todo iba marchando lindo el me iba reconquistando, estuvimos como de luna de miel, los dos nos veíamos con una mirada del más allá, nos decíamos todo de esa forma, y un beso en la mejilla que me elevaba. Quedamos unos meses muy unidos, y al pasar los meses, yo siento algo muy especial por él, y él ha sido mi único novio, ya que fue la mejor experiencia de cuando le entregas el corazón a una persona que tienes sentimientos maravillosos, aunque al principio tenía miedo a enamorarme y después decepcionarme. El tiempo ha pasado y este año esperamos graduarnos del colegio, aunque sé que adentro de mí, no quiero que se acabé esta época linda, ya que mi corazón siente confianza en esta relación, es un sentimiento que puede más que yo y que mi orgullo. Me siento muy satisfecha al escribir mi historia con esta persona que he conocido hoy, pues no lo conozco, pero me ha hecho saber que por medio de la escritura puedo liberarme y dejar huella de mis sentimientos.



Melissa Vásquez. Colegio Tecnológico de Bucaramanga. Grado Once. 18 años.    

Un día como ninguno…

Un día sábado común y corriente, me levanté a las once de la mañana, ya que trabajo en una empresa los fines de semana, en la cual mi turno de trabajo es de cuatro de la tarde en adelante.

Me organicé, me puse mi uniforme, desayuné y me fui a elaborar. Grata sorpresa para mí, que al entrar ala empresa, mi gerente me dijo: ¡Luis no entre a turno!, a mí se hizo muy extraño, cuando de repente lo que me temía, yo no sé en qué momento, cómo pasó o cómo sucedió, pero ahí estaba, enfrente de mí. Yo que soy tan buen trabajador, emprendedor y estudioso, en una frase corta, echado pa’lante.



No me imagine, que me echaran del puesto, después de haber pasado una buena temporada de diciembre y enero. Yo no supe qué pasó en ese momento, pero a los minutos, ya parecía que no me importara, pues sabía que para terminar mi bachillerato encontraría algún trabajo mejor.

Y todavía sigo buscando; un joven desempleado más de este país, que tiene ilusiones y ganas de vivir para cambiar el presente y lograr un futuro diferente con mi familia.



Miguel Cañarete. Colegio INEM. Grado Once. 18 años.    
Un plan B imprevisto

Después de una semana larga de estudio, era sábado en la noche. Un amigo llego a mi casa para decirme que había un concierto en Bucaramanga de Plan B, que es música de Reguetón, que si íbamos, porque tenia una boleta que le sobraba, yo pensé durante cinco minutos, y le dije que sí. Luego nos fuimos cada uno en una moto, la cual nos llevo hasta el estadio Alfonso López. Entonces llegamos a la entrada hicimos la fila, y el señor que pedía las boletas me preguntó que si era mayor de edad, y yo le respondí que no, que era menor de edad. El señor me dijo que tenía que traerle un permiso para poder ingresar. Yo fui por el permiso, lo presenté e ingresé al concierto con mi amigo.

Eran las ocho de la noche cuando comenzó a cantar el artista J. Balvin, lo escuchamos treinta minutos y seguía Plan B, quien era al artista que quería ver y escuchar. Después de que cantó tres canciones estaba muy alegre, y es que con el aguardiente Sello Azul, la noche la estaba disfrutando. El momento más emocionante fue cuando el disco “Secreto”, porque era mi canción favorita, y yo gritaba de la euforia y bailé con unas niñas lindas que estaban a mi lado.



Ya eran como la una de la madrugada, cuando pasaron los artistas vallenatos, y a mí no me gusta el vallenato, entonces yo me senté y me quedé dormido, porque estaba cansado. A la hora me desperté y le dije a mi amigo que nos fuéramos para la casa, y él me dijo que bueno, entonces salimos a comernos una hamburguesa con gaseosa. Al terminar de comer hablamos sobre el concierto, que estuvo bueno, y que la habíamos parrandeado como nunca. Cogimos cada uno un taxi, y llegamos a la casa de cada uno. Yo entré silenciosamente para que mi familia no me sintiera llegar, llegué a mi habitación y al quitarme el reloj de mi mano vi que eran más de las tres y treinta de la madrugada, me recosté en la cama y puse mi cabeza sobre la almohada, y pensé en todo lo que había sucedido en esa salida divertida y cerré los ojos y me dormí.



Sebastián Rodríguez. Colegio Las Américas. Grado Décimo. 16 años.